SER POR DEVOCION

Recién licenciado él joven llamado Elías, celebraba su graduación con algunos de sus compañeros.
Elías comentaba con estos la gran ilusión que tenía, por empezar su labor como doctor sí fronteras, en lugares de necesidad. Sus Amigos comunes como él, también tenían este compromiso.
Sus tres compañeros se llamaban María, Juan y Pablo.
Entre los cuatro formaban un gran equipo y podían enseñar a otras personas formándolas en los servicios sanitarios. También aspiraban a poder unirse con otros médicos como ellos.
Elías tenía muchas posibilidades económicas que le servían de ventaja debido al patrimonio heredado en su formación familiar.
Los padres de Elías convenían entre sí en poder persuadir a éste, para que no fuese a lugares desconocidos e inhóspitos. Donde había riesgo y peligros constantes. Porque enviando ayudas económicas y adelantos científicos que les ayudase a progresar, podría favorecer mejor al tercer mundo, sin arriesgar su vida.
Pero Elías creía que los médicos debían convivir con sus pacientes y conocer de cerca las causas originales de sus sufrimientos. Y así reconocer su prevención y cura.
Elías era humilde y considerado y provocaba gran admiración y respeto. El trato con sus amigos era sincero y lo tenían casi todo en común. Porque se sabían parte del equipo. Elías debido a su disposición de medios era el delegado.
María se sentía por Elías, pero los dos se reprimían para no provocar celos entre compañeros. Al acabar un año disponían de un centro equipado con las instalaciones necesarias y varias mejoras. Y preparaban a personas nativas del lugar para el mantenimiento del hospital.
La situación del país arrastraba una confrontación civil donde daban poco valor a la vida.
Elías era un gran cirujano y aprovechaba los órganos de los desahucios para beneficiar en primer lugar a los familiares y después a las víctimas e inocentes.
La demanda de órganos por otros países desarrollados, proporcionaba los equipos de mantenimiento necesarios y apropiados. Para poner al día la capacidad del centro. en
Con el tiempo el centro se administraba por comités de los cuales formaban parte hombres sin escrúpulos, que convenían con los ocupadores del momento. El cómo mejorarse a costa de los órganos vendidos al mejor postor.
Y debido a esta gran ganancia el hospital parecía un cuartel general por la ocupación gubernamental del momento, para costear y subvencionar la causa de su guerra.
Elías y sus compañeros trabajaban acondicionados por someterse a las voluntades de estas autoridades y de su administración. Elías empezó a rebelarse y esto forzó aún más las condiciones en el hospital. Y como a todos los que se pusiesen de su parte o le ayudasen les acarrearían problemas prefería no meter a sus amigos. Así poco a poco se quedaba mas solo y enfrentado al ejercito que tenia la gobernación en toda aquella zona.
Las cosas se pusieron tan mal para Elías que en sus amigos planeaba sacarle de con vida del país. Maria amaba a Elías y le quería convencer para huir juntos del país; antes de que le detuviesen o le matasen.
María y Elías conversaban en privado sobre todas las cosas que preocupaban que ese momento.
María pregunto sobre la ultima entrevista que había tenido Elías con el comandante del lugar.
Elías explico que había sido amenazado si no les obedecía en todo y dejaba la administración del hospital a los militares.
María le exponía a Elías el plan que ella y sus compañeros proyectaron para que pudiesen huir del país los dos juntos.
Elías que intentaba de no meter en peligro a nadie en esta situación, aun menos a María. Por que no quería arriesgarse de que fuese perseguida y acusada en complicidad con él. Y le intentaba que, convencer diciéndole: Para mí será mucho más fácil escapar si voy sólo y no echan de menos a nadie del hospital.
María le insistía diciéndole: Pero yo quiero irme contigo. Yo me decidí a seguirte, por que te amo y lo que más deseo es estar a tu lado.
Elías la abrazó y le dijo: María si huyo será más fácil para mí escapar solo.
Tú puedes salir sin riesgo de ser perseguida en otro momento. Y podremos reunirnos en poco tiempo. Además como abandonar sin luchar por lo que tanto nos hemos fatigado.
Las cosas fueron empeorando para Elías, y cada vez más eran más fuertes los enfrentamientos con los militares.
Un día el comandante expuso la razón por la que debía acompasarle custodiado con un pelotón militar.
Elías temía que había llegado el momento en que iba a ser sentenciado. Y verdaderamente esa era la intención.
Elías fue llevado por militares hasta un acantilado de rocas junto al mar.
El comandante manda detenerse y ordenó al pelotón quedarse de guardia: Apuntó con su pistola a Elías y le obligó a dirigirse hacia una cueva. Donde todo parecía prever que allí seria el lugar de la ejecución.
Cuando estaban en la entrada de la cueva, el comandante mando a Elías que se detuviese, cogió una lámpara y se adentro más en la cueva. Cuando la luz, no salía al exterior el comandante encendió la lámpara y mando a Elías que mirase detrás de una piedra grande.
Allí había un paquete una caja y unas pocas casas más. El comandante le dijo a Elías:
Esto es suficiente para una travesía por el mar. Una canoa de vela con motor una brújula y alimentos. Si tienes suerte y mantienes el rumbo Norte, llegaras a tierra libre y podrá dirigirte asta tu casa.
Después el comandante disparo tres veces en la arena y enfundando su pistola se volvió a Elías y le dijo:
En otras circunstancias yo hubiese querido ser tu amigo, pero mi situación me acondiciona para obedecer a nuestra causa como militar. Amo mi país y a mis conciudadanos. Y reconozco la labor que hacéis con el hospital.
No quiero hablar sobre lo que es más importante ahora, y tampoco quiero matarte. Pero no permito opiniones que den a lugar rebeliones bajo mi responsabilidad.
Huye cuando estés seguro de que nadie te ve. Nadie sabrá si te salvaste. Pero si té quedas, morirás.
Y cuando estés a salvo evita hablar públicamente sobre nosotros de lo que tu consideras una injusticia. Por que enviaré comandos para que te asesinen cuando menos te lo esperes. Y recuerda que tenemos vivos a tus amigos.
Elías estuvo varios días navegando, asta que fue captado por un barco de pesca.
Cuando tuvo la oportunidad regreso a su casa y allí permaneció mas de un año sin salir.
Segunda parte
Los padres de Elías preocupados de verle deprimido, buscaron los medios para que volviese a ejercer su profesión. Y así renaciesen las ganas de luchar en su vida.
Los informes de su labor como médico sin fronteras eran excelentes. Y su currículo le servia para ejercer la profesión en un hospital publico, privado o del estado.
Sus padres le presentaban opciones a Elías y este reaccionó de su melancolía y se puso a trabajar en un hospital publico de la seguridad social.
A todo el personal del hospital fue presentado Elías con honores y gran profesional y le incluyeron entre el comité de dirección.
Un día se encontró a la salida del hospital con una mujer de unos cuarenta años. Esta mujer informada por otros médicos recurrió a Elías como su esperanza de encontrar ayuda.
La mujer le aborda y le suplico que le atendiese y un momento. Porque necesitaba ayuda y no sabía qué hacer más para conseguir las gestiones que se necesitaban y salvar la vida de su hijo.
Elías entendió la preocupación de aquella mujer y le pidió que le acompañará al despacho, donde la atendería más convenientemente.
Al llegar Elías le ofreció un vaso con agua, que la mujer le pidió para relajarse.
Después de verla más tranquila Elías le preguntó su nombre y le invito a exponer su petición.
La mujer le dijo: Me llamo Ana y mi situación es la de viuda desde hace tres años, con 7 hijos. El mayor tiene 19 años y los menor cuatro años.
El mayor se llama David y a sido para mí una ayuda y apoyo tanto moral como económicamente. Pero hace seis meses tuvo un problema que en su corazón y nos avisaron que necesitaba un trasplante de corazón antes de un año a ser posible, o que si no pudiese morir.
Nuestra situación económica es muy escasa y después estos seis meses estamos muy endeudados.-no dispongo de medios económicos salvo los que dan en caridad y del servicio social.
Un médico amigo nos informó quién era usted para sí es posible que me ayude a salvar la vida de mi hijo. Es mucha la necesidad que sus hermanos y yo tenemos él.
Elías pidió unos informes por teléfono anotando en su ordenador todos los datos y lo que preguntaba a Ana.
Después le dijo: Mire desde ahora haré todo lo que sepa que está en mi mano, vuelva usted mañana con su hijo sobre esta misma hora y le comunicaré los primeros pasos que podremos dar.
Ana sintió un gran descanso en su alma por la esperanza que transmitía Elías.
Al siguiente día Elías tenía todo preparado para el ingreso de David, y su preparación para un trasplante de corazón. Sólo faltaba el órgano del donante y que éste fuese compatible.
Cuando Ana llegó con su hijo David al despacho de Elías. Los dos jóvenes sintieron la necesidad de hacerse amigos, porque sé admiraban mutuamente y confiaban el uno en el otro.
Elías propuso a David ingresar en ese momento para hacerle pruebas y tenerle en disposición.
Ana estaba tan emocionada que lloraba de alegría sin saber cómo agradecerlo.
Elías llamó a la enfermera para que les llevase a una habitación.
En el transcurso de comparecencia de David, Elías le visitaba diariamente para darle ánimo, y el estímulo entre los dos jóvenes era recíproco. Porque David era muy maduro en su meditación como un buen hombre de Fe.
En el mes siguiente desde la comparecencia de David: Ingresaron en el hospital otro joven que enfermo del corazón. Este ingreso alteró la ley de prioridad en el hospital.
Decidido por el comité de dirección en el hospital, este nuevo paciente compartiría la habitación con David. Mientras decidían quien de los dos debería ser trasplantado con prioridad. ¡En caso de que los dos fuesen compatibles al mismo corazón!.
Por un lado estaba David, un pobre sin recursos que había ingresado un mes antes. Y este era quien tenía que ser tratado primeramente según Elías.
Y en la decisión contraria estada todo el comité, porque el nuevo paciente era hijo de un hombre muy influyente y dinero. Y por leyes de economía tenia el derecho, justificado en la mejora de mantenimiento y progreso del hospital.
En su postura Elías era cada vez más criticado por todo el personal sanitario, hasta el extremo que lo excluyeron de grandes responsabilidades y del propio comité. Marginándolo por su postura contraria en la economía del sistema sanitario.
Mientras tanto en la habitación donde se encontraba David y el otro joven, nacía una gran amistad entre los dos. David era visitado muy reguladamente por su madre y sus hermanos. La admiración del joven afortunado económicamente; fue creciendo cada vez más por David creyéndole verdaderamente dichoso. Por que tenía a toda su familia junto a él con verdadero cariño. David incluyó a este joven y gran amigo conocido de las circunstancias, entre su familia. El joven se sentía agradecido e integrado en esta familia circunstancial.
Un día apareció un donante con el órgano compatible para los dos pacientes en espera. El personal responsable en el hospital, llevaron en secreto todas las gestiones y preparativos para evitar a Elías.
Y trasplantaron el corazón al joven que tenía aval económico suficiente de sus padres.
Cuando Elías se informó sintió gran tristeza por David. Y cuando Elías lo visitaba David procuraba entender que la economía es la fuente de nuestro progreso y evolución social. Y aún por muchos mas motivos en la ciencia.
En sólo unas dos semanas al joven que se le había trasplantado el corazón, le notaba la gran mejoría si quisieron cambiarle de habitación. Pero él prefirió compartir su estancia con David.
David empezó a empeorar de su corazón una madrugada y conversando con su compañero de habitación le pidió; que se despidiese de su familia y de Elías de parte suya. Y que les estaba agradecido por todo cuanto le quisieron e hicieron para él. Su compañero de habitación quería llamar a los médicos para que atendiesen a David, pero este le sujeto y le pregunto. ¿Amáis a mi familia?
El compañero le contestó.- David tu familia es como la que todos deseamos ganar.
David le pidió.- Cuídala tu por mí.
Y después David expiraba dando libertad a su espíritu.
Su compañero se le abrazó llorando y le prometido: Yo seré para tu familia, como si fueses tú David.
Al morir David, todo quedó como vacío en el hospital para Elías, porque se sentía marginado.
El compañero de David con la ayuda de Elías, hizo el cumplimiento su ultimo deseo.
Elías daba gracias a Dios porque todo salió a un mejor de lo que él podría imaginarse. Sí porque el amigo adinerado de David acogido a su madre y hermanos como a miembros de su propia familia. Y hasta la familia de este se contagiaron con buena disposición, por el agradecimiento sincero y el cariño que les tenían.
Tercera parte
Pero Elías se sintió como un extraño en el hospital y se marchó. Un decano de universidad que le conocía le propuso ser instructor práctico y dar conferencia en la universidad. Siendo médico titular de allí.
En sus conferencias Elías explicaba la diferencia de ser un médico con devoción.
O ser un médico de alta sociedad, interesado por un nivel económico más elevado.
Un periodista le entrevistó y le propuso escribir su testimonio sobre todo cuanto a él, le hubo sucedido. Y que así pudiese dejarlo en conocimiento y como denuncia para otros.
Cuando descubrió esto sintió mucho temor, porque recordaba las amenazas que le hizo el comandante, cuando le echo de la nación dónde estuvo sirviendo como médicos sin fronteras.
El miedo le causó gran obsesión, haciéndole creer que por los lugares donde iba le espiaban para asesinar. Su pánico le hacía comportarse como un desequilibrado mental. Y se ocultaba y recelaba de todos los extraños.
Un día asustado creía escapar en una maniquí manipulado persecución, cruzó en una calle sin mirar y tuvo un accidente que le hirió mortalmente.
Y subconsciente mente Elías vivía en una alucinación, que no tenía nada que ver con la realidad.
Elías fue ayudado por dos hombres, pero el golpe fue tan terrible, que se quedo completamente aturdido. Estaba como un hombre mareado por el alcohol.
por su alucinación creía ver que dos hombres le secuestraban introduciéndole en un coche
Esto no era lo que verdaderamente estaba sucediendo con respecto a la realidad. Pero en su mente estaba delirando.
Él veía que le secuestraban contra su voluntad. Y no que estaba siendo recogido para llevarle al hospital y ser curado.
Y cuando era llevado en el coche, uno de los hombres llamo con su teléfono móvil asistencia por accidentes. Estos les enviaron rápidamente una ambulancia, para que se encontrara con ellos y transbordar al herido.
Cuando la ambulancia contacto con ellos, trasladaron a Elías y sujetaron en la camilla para prestarle los primeros auxilios.
Esta situación le parecía al herido como si le narcotizaran y le sometiesen introduciéndole en una avioneta para sacarle del país.
Él desvarió era tanto que los médicos temían por su vida. Y se daban mucha prisa por llegar a tiempo al hospital, donde pudiesen tratar las lesiones internas.
Mientras era curado de sus heridas en la cara, a él le parecía que le estaban maquillando para mejorar su imagen de presentación.
Cuando llegaron al hospital los médicos y sanitarios que le veían le reconocieron, y se acercó asta él con gran preocupación cogiendo le dela mano para trasmitirle ánimo.
En la menté de Elías a él le llevaban a la nación donde fue amenazado de muerte y expulsado. Pero a sus ojos él creía que estaba siendo visto con gran reconocimiento y admiración.
Con verdadera urgencia los camilleros metieron a Elías en el quirófano, para ser examinado de sus hemorragias internas y contusiones cerebrales.
Los médicos procedieron a anestesiarle parcialmente por temor al desvarió cerebral de su alucinación.
Elías creída que lo conducían hacia un balcón de la plaza principal donde uno de la multitud de personas y le honraban con sus vítores por ser un buen hombre y un buen doctor.
Y echando lágrimas de contentamiento y agradecimiento. Cuando sus emociones y sentimientos se alteraron su corazón cada vez más fuerte y acelerado empezó a sufrir taquicardia.
Los doctores en el quirófano luchaban por retener su vida, pero la visión de Elías eran tan influyente en sus sentimientos. Que sufrió un paro cardiaco y el sufrido corazón dejó de latir.
Cuando los doctores quitaron la mascarilla del oxígeno y vieron en la cara de Elías quedaron muy asombrados. Por qué lloraba de felicidad.
Elías se había dormido en paz con la muerte. Y su labor misional, como médico sin fronteras, había llenado su alma de satisfacción y contentamiento para su vida.
La vida de Elías es un reflejo del gozo que sienten todos los que dan sus vidas en el servicio por sus semejantes. Y de los que sufren las injusticias por defender a las víctimas e inocentes.